DONÁ SANGRE, DONÁ VIDA
El 9 de noviembre de 1914 en el Hospital Rawson de la Ciudad de Buenos Aires, el Dr. Luis Agote (1868-1954), médico e investigador argentino logró por primera vez la técnica de transfusión de sangre con el anticoagulante citrato de sodio. Antes de este aporte no se podía conservar y almacenar la sangre para utilizarla posteriormente, debido a que la misma fuera de los vasos sanguíneos se coagula; en ese entonces la donación se trataba de una intervención compleja e incierta de altísimo riesgo, conectando directamente la arteria del donante a la vena del paciente. Es por eso que hoy se celebra el Día Nacional del Donante Voluntario de Sangre, conmemorando el aniversario de este hito en la historia de la medicina mundial.
La #donacióndesangre constituye un acto solidario de suma importancia, ya que es el único medio a través del cual se pueden obtener los componentes sanguíneos necesarios para el tratamiento de muchas patologías. Cinthia Alabart bioquímica del Hospital de Villa Regina nos mete de lleno en el tema y nos cuenta “El sistema actual predominante es el de donación de sangre por reposición, se dona sangre cuando un familiar, amigo o conocido necesita una transfusión, es decir que todavía dependemos de los donantes que les pedimos a los pacientes”, la meta de la organización internacional de la salud es que se llegue a tener 100% de donantes voluntarios. “Esto se logra con mucho trabajo sobre todo en las nuevas generaciones, en las escuelas, concientizando de la importancia de la #donacióndesangre”, agregó Cinthia.
“El cambio cultural, de conciencia y responsabilidad que debe haber es que la gente done sin que se lo pidan” indicó la bioquímica. La persona que dona sangre en forma voluntaria, sin presiones que lo impulsen, desconociendo el beneficiario de su acto y motivado por el bien común se constituye en un donante altruista de sangre. “Este tipo de donantes suele estar informado sobre la importancia y responsabilidad que implica dicho acto, también posee menor incidencia de infecciones transmisibles por transfusión debido a que no tiene razones para ocultar información relacionada con su estado de salud, por tal motivo, constituyen la base de un suministro adecuado y seguro de sangre”, explicó la profesional.
La #donacióndesangre es una terapia fundamental e irremplazable, hasta el momento no existe ninguna innovación tecnológica que la supla. “Invitamos a todos a que pierdan el miedo, pongan su brazo y piensen que van a estar salvando una vida con este acto” concluyó Cinthia.
En la Argentina, se requieren aproximadamente 1.500.000 donantes por año para alcanzar la autosuficiencia, pero solamente el 1,5% de la población (alrededor de 500.000) dona sangre. Nueve de cada diez personas conocen a alguien que necesitó recibir una transfusión alguna vez en su vida. No esperemos a que nos lo pidan, donemos sangre, salvemos vidas.