se-reprograma-la-‘bicicleteada-rural’

Se reprograma la ‘Bicicleteada rural’

La Dirección de Turismo y la Dirección de Deportes de la Municipalidad de Villa Regina informan que la propuesta denominada ‘Bicicleteada rural’ se reprograma para el viernes 29 a partir de las 19 horas.

Se mantendrá el circuito previsto inicialmente, con punto de encuentro en la Oficina de Turismo y una recorrida por el entorno rural hasta llegar a Chacra Arana, donde se compartirá una merienda.

La actividad iba a realizarse mañana sábado pero debido a las altas temperaturas previstas se decidió su reprogramación.

Difunde esta nota

Publicaciones Similares

  • Escándalo en José C. Paz: trompadas y sillazos en medio de la jura de concejales

     

    Una gresca de proporciones, con trompadas y sillazos, se desató este viernes durante la jura de los nuevos concejales en José C. Paz.

    A poco de finalizar un acto cargado de tensiones entre el oficialismo local alineado a Mario Ishii y la oposición libertaria, los cruces se trasladaron a las inmediaciones del recinto y el hall del Concejo, donde volaron sillas y proliferaron puñetazos entre militantes de ambos espacios.

    En medio del descontrol, el intendente Mario Ishii tomó el micrófono para reclamar calma y orden. Pero la batahola era tal que hasta dentro del propio recinto concejales de un lado y otro discutían a los gritos sin escuchar la voz del caudillo.

     Se trataba de una sesión de jura especial y con un nutrido marco de militancia, ya que se trataba de la ceremonia previa a la salida de la intendencia de Ishii, quien asume su banca en el Senado bonaerense.

     «Lo que pasa es que esta señora, señorita o no sé qué es, dijo que lo iba a rajar de patadas en el culo al intendente. Es la que genera esto afuera del recinto», dijo en medio de la gresca la concejal de Ishii Lorena Ramírez, que acusó a la libertaria Mía Amoroso por haber desatado el caos.

    «Es una locura que se genere violencia porque yo grite ‘Viva la libertad carajo'», dijo la concejal libertaria Mia Amoroso al portal local Dar Info en pleno recinto, donde la concejal de Ishii Lorena Ramírez intervino en el reportaje para acusarla de provocar.

    «Lo que pasa es que la señora, señorita o no sé qué es, dijo que lo iba a rajar de patadas en el culo al intendente. Es la que genera esto afuera del recinto», dijo Ramírez, al apuntar directo a la libertaria Amoroso como la generadora del caos.

    Amoroso denunció en redes un «ataque» de militantes y prometió hacer una denuncia en fiscalía. «A uno le fracturaron la mandíbula, a otra la arrinconaron entre hombres y la molieron a palos», dijo.

    En el oficialismo local acusan a la concejal libertaria de haber provocado con gesticulaciones en las intervenciones de concejales de Ishii y de haber fogoneado a la militancia libertaria para ir al choque en medio de una multitudinaria presencia de militantes oficialistas.

     

    Difunde esta nota
  • | |

    LA FAROFA

    Hola!!! Me presento. Mi nombre es Vic Mos, soy una amante de la cocina, de la naturaleza, un poco bruja, alquimista, viajera y también soñadora. Hace ya nueve lunas que estoy viajando por Brasil. Toda una gestación maravillosa de momentos y experiencias increíbles. Estas tierras nuevas donde hoy estoy caminando me hacen sentir como en…

    Difunde esta nota
  • Una mega inversión para exportar GNL desde el Puerto La Plata reaviva el impulso por el Canal Magdalena

     

    Camuzzi Gas Inversora anunció un mega proyecto de GNL por USD 3.900 millones para exportar desde el Puerto La Plata gas natural producido en Vaca Muerta.

    Además de potenciar exponencialmente la dinámica portuaria, en La Plata ven que la inversión también reaviva la demanda al gobierno nacional por la obra del Canal Magdalena, proyecto descartado por Javier Milei y que en la administración de Axel Kicillof consideran central para evitar sacar la carga por Montevideo.

    «El Canal Magdalena empieza a tomar cada vez más forma y a ser más imperioso. Para este servicio (de exportar GNL) sería muy útil que el canal se realice, mejoraría muchísimo sus posibilidades», dijo a LPO el titular del Puerto La Plata, José María Lojo.

    En concreto, Lojo sostuvo que el Canal Magdalena abriría la posibilidad de acceso de buques de mayor magnitud y mejores circuitos, por lo que analizó que Camuzzi «apunta a que esa obra en algún momento se va a realizar».

    La compañía controlada por Alejandro Macfarlane, Jorge Brito y el grupo empresario italiano encabezado por Fabrizio Garilli tiene previsto comenzar las obras en 2026 con una inversión inicial de USD 300 millones, con la proyección de comenzar a operar a inicios de 2028.

     El Canal Magdalena empieza a tomar cada vez más forma y a ser más imperioso. Para este servicio (de exportar GNL) sería muy útil que el canal se realice, mejoraría muchísimo sus posibilidades 

    El proyecto «LNG del Plata» prevé obras que vinculen el sistema existente con el puerto y se prevé construir un gasoducto subacuático de 10 kilómetros conectado a una plataforma offshore donde estará amarrado un buque licuefactor (Floating LNG) que procesará el gas proveniente de Vaca Muerta para convertirlo en Gas Natural Licuado, facilitar su transporte marítimo y exportarlo.

    El posicionamiento del Puerto La Plata como boca de salida del gas de Vaca Muerta desde la provincia de Buenos Aires se venía proyectando en términos de confidencialidad hace tres años e implica un plan de inversiones por 20 años.

    Para eso, en Camuzzi confirmaron que ya presentaron el proyecto a Nación y Provincia. Con el gobierno de Javier Milei exploran el ingreso al RIGI, mientras que en la administración de Axel Kicillof buscan una legislación especial para contar con estabilidad impositiva.

    Con gremios e intendentes, Kicillof activa la presión a Milei por el Canal Magdalena

    La idea es exportar 9 millones de metros cúbicos diarios de gas natural entre septiembre y mayo, cuando la demanda local baja. Semejante volumen posiciona al proyecto como uno de los más ambiciosos del mercado energético local. En total, se estipula la creación de 500 puestos de trabajo.

    «El proyecto aportará más de USD 14.500 millones en divisas provenientes de exportaciones, fortaleciendo el rol de Argentina como proveedor estratégico de energía a nivel mundial», dijo Macfarlane, presidente de Camuzzi.

    En esa línea, Lojo sostuvo que esta inversión representa «un crecimiento importante para el puerto, la región, la provincia y el país, porque significa generar divisas, otra de las grandes necesidades que tenemos en Argentina».

     En Camuzzi confirmaron que ya presentaron el proyecto a Nación y Provincia. Con el gobierno de Javier Milei exploran el ingreso al RIGI, mientras que en la administración de Axel Kicillof buscan una legislación especial para contar con estabilidad impositiva. 

    El titular del Puerto La Plata consideró que la actividad del puerto se verá multiplicada. «Hay una obra, más movimiento, más barcos, más trabajo y servicios para realizar la obra y después operar esa instalación. Es mayor actividad en el puerto y las empresas proveedoras de servicios para esa plataforma», dijo.

    Junto a eso, en el puerto creen que la inversión de Camuzzi dotará de más espalda al reclamo por la obra del Canal Magdalena, vía que permitiría contar con una salida propia al mar sin pasar por Montevideo.

    Como contó LPO, el Canal Magdalena supone la creación en La Plata y la región de un hub portuario donde reunir las cargas para luego redistribuirlas. Se trata de un puerto que funciona como centro de conexiones y logística de distribución.

    Eso, permitirá ofrecer en la provincia todos los servicios portuarios que hoy ofrece Montevideo y por el que percibe entre 100 y 150 millones de dólares anuales. 

     

    Difunde esta nota
  • Limpieza y acondicionamiento de calles en barrio Matadero

    La Dirección de Servicios Públicos de la Municipalidad de Villa Regina llevó adelante este martes trabajos de limpieza y acondicionamiento de calles en barrio Matadero. En este sector de la ciudad se procedió a levantar los residuos no domiciliarios y escombros que se encontraban en distintos puntos del barrio. Por ello, la Municipalidad solicita a…

    Difunde esta nota
  • El laboratorio imposible

     

    Crónica, literatura de no ficción, no ficción creativa, performance, biodrama, pódcast documental, periodismo performático: formas anfibias que tienen en común la rigurosidad en la investigación periodística y el trabajo con una misma materialidad, lo real. Estas formas incluyen, aunque a veces solapadas, dos componentes que habitualmente se suelen pensar solo ligados al mundo del arte: la creatividad y la imaginación.

    ¿Qué podrían aportar las herramientas del arte, incluso de la ficción, para relatar una época, un acontecimiento, un conflicto? Desde la posmodernidad hasta hoy, lo real dejó de ser un lugar seguro para transformarse en un nodo de interpretaciones; tantas como sujetos que interpretan.

    La realidad como construcción discursiva

    En su conferencia “Laboratorio de no ficción creativa para directores de medios de América Latina”, la maestra Cristina Rivera Garza abordó este tema. Dijo que en las narrativas de no ficción creativa hay un trabajo de intervención, de implicación, y no de rescate.

    Eso hacemos en el Laboratorio de Periodismo Performático (LPP): nos comprometimos con los archivos, con los testimonios, intervinimos el espacio, los materiales. Los resignificamos y agrupamos para producir metáfora, para producir sentido.

    Rivera Garza señaló también que el borde entre ficción y no ficción es cada vez más delgado. Echó por tierra ese paradigma según el cual por un lado estaría la ficción “pura” –vinculada al campo de la literatura y de la imaginación– y, por otro, la realidad como algo que está allí afuera, objetivamente descriptible y medible.

    Esa división tajante entre la realidad vinculada con la historia –o el periodismo– y la ficción, con la literatura, cada una con su esfera bien delimitada, ya no funciona.

    En su lugar, propone aceptar la idea de que la realidad es una realidad-ficción que, en su forma constitutiva, en su estructura, tiene una gramática y una semiótica propias. Piensa la realidad como construcción teórico-discursiva.

    Si vivimos una realidad que es resultado de cómo producimos signos y significados, entonces la disociación entre ficción y no ficción es muy difícil de sostener. El campo del psicoanálisis lacaniano también sumó sus argumentos al distinguir la realidad –lo que un sujeto percibe y entiende– de Lo Real –lo que no se puede simbolizar, lo que no se puede aprehender ni entender, comprender, conceptualizar, decir, nombrar, representar–. Lo vinculó a la sexualidad, a lo horroroso, a la muerte, al vacío, al delirio, al trauma. El periodismo performático apunta también a los intersticios donde se aloja Lo Real, a bordear lo traumático, lo inenarrable, a hacer el intento de bordear aquello que no se puede nombrar, a asomarse a mirar al cráter del volcán, como dice Cristian Alarcón.

    El lenguaje del arte ante lo indecible

    ¿Cómo narrar el genocidio del pueblo mapuche? Sobre eso trabajó Sebastián Hacher en su obra Inakayal vuelve.

    ¿Cómo narrar un femicidio y lo horroroso de un cuerpo mutilado? De eso se ocuparon María Eugenia Cerutti y Alejandro Marinelli en Con toda la muerte al aire.

    ¿Cómo abordar el trauma infantil? Sobre eso pensaron Rocío Inmensidades y Ana Larriel en Micropolítica de la supervivencia gorda y también Cristian Alarcón junto con Lorena Vega en Testosterona. 

    ¿Cómo denunciar un ecocidio en lenguaje performático? Eso logró Blanca Lewin con Puchuncaví, el humo en el cuerpo.

    Ahí donde las palabras encuentran su límite para narrar, para decir lo indecible, aparecen el arte, la metáfora y la poesía. De esta reflexión nace el provocador eslogan –¡que indignó a muchos!– de la convocatoria a la primera edición del LPP: “La palabra ya no tiene el poder”.

    El periodismo performático como arte contemporáneo

    Para entender mejor esta transformación es necesario mirar hacia atrás. Desde Aristóteles y la antigua Grecia, el teatro fue concebido como representación, una presentación que existió y puede volver a presentarse en el espacio escénico. La mímesis: una imitación.

    Durante siglos todas las expresiones artísticas fueron eso, una imitación de la realidad. Recién a mitad del siglo XX, con las transformaciones que propuso el arte contemporáneo, esos límites entre ficción y “realidad”, entre ficción y no ficción, se volvieron más difusos.

    En el mundo de la pintura, Cézanne –llamado el padre del impresionismo– fue el primero en alejarse del realismo y en evidenciar la pincelada. Lo siguió el cubismo, que deconstruyó la figura para mostrarla en sus múltiples posibilidades y puntos de vista, tal como lo hizo Picasso. Duchamp dio un paso más y creó su famoso mingitorio. Más acá en el tiempo, Maurizio Cattelan alborotó el mundo con la obra El comediante, una banana pegada en la pared con una cinta.

    Al iniciar ese proceso de autonomía, las vanguardias del siglo XX dejaron en evidencia sus mecanismos de construcción, funcionamiento, engranajes: así expusieron su semiótica. Quedaron atrás las reglas heredadas del arte clásico que permitían determinar claramente qué era una obra de arte y qué no. Ya no importaron las normas de la composición, de tratamiento de color o uso de la perspectiva: era la hora del acto, de la provocación, de la performance.

    Con la danza contemporánea pasó lo mismo: se desligó de sus vínculos con la pintura –la danza como pintura en movimiento– y con la literatura –ya no aspiraba a narrar una historia– y se convirtió en puro movimiento.

    Merce Cunningham, en su trabajo junto con el músico John Cage, fue uno de los que propuso que la base de la danza es el movimiento, lo siguieron artistas como Martha Graham, Mary Wigman y más tarde Pina Bausch.

    En las artes dramáticas, este proceso de autonomía siguió caminos diversos pero convergentes. El teatro del absurdo, surgido tras la Segunda Guerra Mundial con Samuel Beckett, Eugène Ionesco y Harold Pinter, rompió con la lógica narrativa tradicional: ya no importaba construir argumentos coherentes o personajes psicológicamente verosímiles. Sus procedimientos incluían diálogos y acciones aparentemente inconexos. La puesta en escena –silencios prolongados, objetos extraños, atmósferas opresivas– se volvía tan significante como las palabras.

    El teatro brechtiano desarrolló otros procedimientos de ruptura: el “efecto de distanciamiento” destruía sistemáticamente la ilusión teatral. Brecht hacía que los actores se dirigieran directamente al público, interrumpía la acción con canciones y carteles explicativos, dejaba las luces del teatro encendidas y exponía la maquinaria escénica. Su objetivo era que el espectador no se perdiera en la emoción, sino que mantuviera una distancia crítica para reflexionar sobre los problemas sociales.

    Más tarde, el teatro posdramático –término acuñado por Hans-Thies Lehmann– radicalizó esta autonomía al liberarse completamente de la estructura dramática tradicional. Sus procedimientos privilegian la experiencia sensorial: fragmentos de texto no narrativos, paisajes sonoros, movimientos corporales abstractos, instalaciones escénicas y la disolución de los límites entre actores y espectadores. Ya no se trata de representar una historia, sino de crear una experiencia.

    Así, el teatro logró su autonomía no solo del texto dramático, sino también de la obligación de representar, de narrar, de explicar. Se concentró en generar experiencias, sensaciones, reflexiones a través de la materialidad escénica: el espacio, el tiempo, los cuerpos, los objetos, la luz, el sonido.

    Si la danza se liberó de la literatura y de la pintura para ser puro movimiento, si la pintura se liberó de las reglas para ser pura abstracción, si el teatro se liberó del texto dramático para ser teatro posdramático, ¿de qué se libera el periodismo para ser periodismo performático?

    Con estas referencias como faro, en el Laboratorio de Periodismo Performático intentamos acercarnos a un tema, a la historia y al foco. Las materialidades con las que trabajamos son testimonios, fuentes, archivos históricos, archivos afectivos, abordadas con los lenguajes del arte: espacio, tiempo, música, luz, movimiento, poesía, metáfora. Construimos narrativas

    que trascienden la palabra escrita, dispositivos escénicos que se despliegan en un espacio tiempo donde la clave estaba en el encuentro de los cuerpos, en el estar ahí presentes.

    Unas palabras sobre la imaginación acuerpada

    La performance es, en esencia, un género anfibio: habita entre las artes plásticas y las artes vivas, entre el espacio teatral y el espacio público, entre el arte y el activismo. Quizá el LPP se aloje allí entre el “cierre periodístico” y la “apertura performática”. Retomando a Rivera Garza podríamos pensar que el LPP le permite al oficio del periodismo recuperar la imaginación que la ficción había legitimado solo para sí misma y que es un rasgo intrínseco de todo ejercicio de escritura y lectura.

    En su segunda edición en Argentina, coordinada por Cristian Alarcón y Lorena Vega, el LPP tomó una forma más escénica y habilitó al periodista a descubrir un nuevo modo de poner el cuerpo, en muchos casos lo invitó a implicarse ahora como performer. En todos los casos debió encontrar modos para que los protagonistas de las historias tomaran la palabra en escena, inventar formas de incorporar los datos y descubrir otro modo de producir sentido y belleza con lo real.

    La irrepetibilidad de la performance callejera, atada a la coyuntura, resultaba difícil para un trabajo de largo aliento. Seguramente, la impronta de Lorena Vega y su trayectoria en el campo del biodrama con Imprenteros alentó a investigadores y periodistas a subirse al escenario. Eric Román Montenegro, varón trans, ciego de nacimiento, da testimonio de su transición a través de un dispositivo musical y un texto que construyó junto con la periodista Ivanna Soto, quien lo guía en escena durante la ejecución de la performance Yo elijo mi

    nombre. La socióloga Eleonor Faur y la artista Ana Minujin, madre e hija, entrevistaron a otras duplas de madres e hijas para la performance La revolución y algo rico para el postre, y les propusieron una consigna: que se enseñaran algo la una a la otra: un juego de palmas y manos, una canción. Apareció así otro componente clave de las artes vivas: el juego. En

    Pena y pachanga, las y los protagonistas de historias migrantes narraban en escena sus propias historias a medida que se desarrollaba una fiesta de salsa.

    Históricamente, la performance intentó escapar al concepto de representación. Allí donde el teatro propone representación, volver a presentar unos acontecimientos, repetir una historia escrita por un dramaturgo para que un grupo de actores la represente en el espacio escénico, la performance prefiere el acto mismo, la acción directa. En su versión más purista se define como única e irrepetible, como puro acontecimiento, como puro acto. En ese sentido el LPP es un dispositivo narrativo dinámico, que está vivo y muta. Cada historia y cada obra encuentra su propia forma de ser narrada.

    El LPP recupera la imaginación y se libera de tener que promulgar verdades. Convoca a la pregunta, a la conversación. Va al encuentro del otro. Se implica en la presencia física, en un espacio-tiempo colectivo. Subvierte la idea del autor solitario. Asume un compromiso ético. Produce conocimiento. Trabaja con el lenguaje para producir belleza con lo real.

    La entrada El laboratorio imposible se publicó primero en Revista Anfibia.

     

    Difunde esta nota
  • VIAJE CON MALBEC

    En esta oportunidad, Facu Gagliano, sommelier internacional nos muestra el mapa del Malbec en Argentina. Para leer con la agenda y el mapa a mano. Argentina es un país que presenta una gran diversidad climática y geográfica, la Malbec puede expresar estas diferencias en los vinos que se elaboran con ella en todo el ejido…

    Difunde esta nota

Deja una respuesta