Los artistas de la ciudad y la región se reencontraron con el escenario en la primera noche de la Maratón Cultural que tuvo lugar este viernes en el Cine Teatro Círculo Italiano.
El Intendente Marcelo Orazi participó de la actividad que, además, fue el marco para comenzar con la entrega de los certificados a los 90 hacedores y hacedoras culturales que participaron de las capacitaciones brindadas en el marco de este programa que lleva adelante la Secretaría de Estado de Cultura de Río Negro.
Orazi estuvo acompañado por la Secretaria de Desarrollo Cultural de Río Negro Nancy Sierro y la Directora de Cultura del Municipio Silvia Alvarado.
Vale aclarar que no se permite el ingreso de público pero las actuaciones podrán ser seguidas en vivo a través de las redes sociales: en www.facebook.com/MunicipioDeVillaRegina, en www.facebook.com/CulturaRN y en You Tube “Río Negro Cultura”.
El cronograma de presentaciones de hoy sábado serán:
18,15 horas: Estefanía Donzelli (show de danza oriental)
Por más que lo intentan, no hay caso: al Gobierno se le hace cuesta arriba concretar una sola privatización importante. Muy cerca de la mitad de su mandato, Milei sólo logró vender la mitad de la mendocina Impsa, por la que además no recibirá ni un dólar, los fondos prometidos son para afrontar deuda y capitalizar la firma fundada por Pescarmona.
El responsable de llevar adelante el proceso de privatización, Diego Chaher, responde directamente a Santiago Caputo que es quien maneja todas las empresas del Estado. Pero no es el único responsable de este fracaso, también el ministro Toto Caputo que controla toda el área energética logró vender las joyas que quedan en ese sector, como las acciones estatales en la transportadora Transener.
“Siempre pasa lo mismo, cuando se dan cuenta de los recursos que manejan las empresas del Estado, los sueldazos que se pagan, las secretarias, los choferes, la pauta, pierden el entusiasmo por privatizarlas”, explicó a LPO un funcionario que tiene una mirada muy crítica sobre la gestión del principal asesor de Milei.
En efecto, Aerolíneas Argentinas y el Banco Nación no avanzaron ni un centímetro en la privatización o la menos la incorporación d ecapital privado. Lo mismo pasó con Arsat, el Correo y las rutas nacionales. Sólo se lanzó la licitación de la destruida “Ruta de Mercosur, la ruta nacional 12 que cruza Entre Ríos y por ahora no hay novedades.
Siempre pasa lo mismo, cuando se dan cuenta de los recursos que manejan las empresas del Estado, los sueldazos que se pagan, las secretarias, los choferes, la pauta, pierden el entusiasmo por privatizarlas.
Las razones son muchas, pero todas confluyen en un mismo punto: no hay gestión, no hay coordinación política y, sobre todo, no hay muñeca para navegar intereses cruzados y resistencias locales.
“No logran ni hacer bien un pliego. Incapacidad de gestión y de coordinación política. No tienen gente capacitada. Ni funcionarios políticos de peso para articular los intereses y llevar a cabo el proceso”, dice, sin filtro, un empresario con acceso a los despachos oficiales.
El mendocino Diego Chaer, a cargo de privatizar las empresas públicas.
Uno de los casos más sintomáticos es el de la mencionada Ruta del Mercosur. Se anunció, se canceló, se volvió a anunciar, se retocó, se suspendió otra vez. Entre internas en Vialidad, que después se disolvió y que ahora el Congreso anuló la disolución, marchas y contramarchas con Transporte y falta de aval político desde Jefatura de Gabinete, el expediente se convirtió en una carrera de obstáculos. Hoy, sigue empantanado.
Algo similar ocurre con Transener, la empresa que transporta más del 80% de la electricidad del país. El gobierno amagó con privatizarla desde el verano, pero ya pasaron ocho meses y la secretaría de Energía pidió ocho meses más. No hay precio, no hay modelo, no hay plan. Hay lobby, sí. Pero ni eso alcanza para mover el amperímetro.
Respecto a la venta de Aysa, Mekorot, la empresa estatal de agua de Israel, salió a despegarse de la compra de la compañía y dejó en ridículo al gobierno de Javier Milei que había salido a festejar la posibilidad de que se concrete esa operación.
La primicia de LPO sobre las versiones de que Mekorot podría desembarcar en AySA, asociada con los empresarios argentinos Daniel Sielecki y Mauricio Filiberti, causó un enorme revuelo y obligó a la compañía israelí a aclarar que no puede comprar activos en el extranjero.
Ahora, el presidente de AySA, el ex macrista Alejo Maxit, asegura el interés de las empresas de aguas de San Pablo y de Santiago de Chile y promete que en menos de tres meses ya la tiene vendida. Veremos.
El presidente de AySA, el ex macrista Alejo Maxit, asegura el interés de las empresas de aguas de San Pablo y de Santiago de Chile y promete que en menos de tres meses ya la tiene vendida.
Con las represas del Comahue, la falta de acuerdo con los gobernadores patagónicos empujó la decisión de prorrogar una vez más la concesión. Ni la voluntad política ni la técnica se animaron a desatar ese nudo y licitarlas.
“No saben como tasarlas. Contrataron consultorías millonarias pero desconocen que hay que diferenciar stock, el activo propiamente dicho, en relación al flujo, que depende del costo de generación convalidado”, explicó la fuente consultada.
Intercargo, que presta servicios a las aerolíneas en tierra, tampoco logró despegar. Parecía un caso fácil, hasta lógico: una empresa monopólica con ingresos en dólares, apetecible para el sector privado. Pero el expediente no avanzó. Hay resistencia gremial, falta de marco normativo, y un silencio oficial que se hace cada vez más evidente.
El presdiente de Aysa, Alejo Maxit.
El Belgrano Cargas es otra historia sin historia. Fue mencionado en los papeles del ajuste, incluso en discursos. Pero no hay ni un pliego, ni un llamado a licitación, ni una expresión mínima de intención concreta de venta.
Por no hablar del fracaso más estrepitoso que golpea de lleno a Chaher: la venta de Canal 7 y Radio Nacional. El mendocino empezó su recorrido en la administración libertaria como jefe de los medios públicos con la misión de venderlos todos: Milei hasta anunció en su primer discurso ante la Asamblea Legislativa el cierre de T’elam, la verdad es que la agencia sigue existiendo, sólo que de manera clandestina, ya no brinda un servicio público, sino que gasta su abultado presupuesto en hacer “gacetillas” que sólo reciben los funcionarios. Un delirio.
Se anunció que se iba a empezar por vender los carísimos terrenos de la Televisión Pública sobre la avenida Libertador y los de Radio nacional junto a la Panamericana. Casi dos años después nada. Los funcionarios aducen problemas legales -bienevidos a la política argentina-. Con ese criterio, Menem no habría podido vender ninguna de las grandes empresas públicas argentinas.
El fracaso más estrepitoso golpea de lleno a Chaher: la venta de Canal 7 y Radio Nacional. El mendocino empezó su recorrido en la administración libertaria como jefe de los medios públicos con la misión de venderlos todos: a mitad del mandato de Milei no se avanzó nada.
En paralelo, el Gobierno sorprendió este jueves con un gesto casi imperceptible: anunció, en voz muy baja, la venta de Cine.ar, un canal público dedicado al cine argentino. Si uno parpadea, se lo pierde. Lo concreto es que no tiene impacto fiscal.
El caso más insólito, sin embargo, fue la primer licitación que completó el gobierno para el almacenamiento de energía para el verano, las famosas “pilas”. La Secretaría de Energía lanzó la licitación pero fracasó. Emparchó y volvió a fallar. Emparchó otra vez. Y ante la tercera caída por la falta de acuerdo con los privados, tuvieron que poner a Cammesa como garante para que el proceso no colapsara. “Un típico caso de paternalismo del Estado”, dijo el empresario consultado en tono irónico.
Frente a este panorama, muchos recuerdan a Roberto Dromi y las privatizaciones de los 90. Aquel proceso, tan vertiginoso como polémico, logró privatizar casi todo: YPF, Aerolíneas, Entel, los trenes, los teléfonos. Verdaderos monstruos estatales. El Estado recaudó miles de millones de dólares. Hoy, con viento a favor, vendiendo absolutamente todo lo que queda, se calcula que se podrían conseguir apenas mil millones. Una cifra casi simbólica. Pero incluso esa meta parece inalcanzable para la desorientada administración libertaria.
Lejos quedaron los almuerzos distendidos, en los que el presidente Milei se movía con soltura entre los empresarios como un animador ocurrente. Los hombres de negocios reunidos por el Consejo Interamericano de Comercio y Producción (CICyP) para escuchar a Milei, estaban incómodos. El impacto del escándalo de las coimas era el tema.
“El Presidente tiene que entregar una cabeza y normalizar, porque si no el daño es para todos”, resumió un importante hombre de negocios, en diálogo con LPO. La “cabeza” que se menciona con más insistencia es la de Lule Menem, señalado por Spagnuolo como el encargado de recolectar las coimas de la droguería Suizo Argentina.
No se trata, solamente, de un tema de ética. El caso terminó de derrumbar la expectativa de los empresarios de una baja del riesgo país que permita volver al mercado voluntario de deuda.
Se suma el caso al malestar creciente ante un programa que desde el fallido desarme de las Lefi, no encuentra un norte. De hecho, Milei acaso consciente que Economía filtró que él es el responsable de esa mala praxis, defendió la medida ante los empresarios.
El discurso de Milei no convenció, mientras hablaba en el salón se escuchaban comentarios en voz baja. Un banquero fue directo: “Se olvidó de mencionar que los encajes saltaron al 53,5%”. Otro agregó: “Asegurar que la suba de tasas no frena la actividad… bastante ingenuo”. Tampoco hubo consenso sobre los números de crecimiento que mostró con entusiasmo. “Marca el dato que le conviene y esconde el resto”, deslizó un industrial.
Milei se olvidó de mencionar que los encajes saltaron al 53,5%Asegurar que la suba de tasas no frena la actividad… bastante ingenuo.
Las encuestas que circulaban en las mesas plantean un escenario menos favorable del que imaginaba la Casa Rosada. Sin embargo la preocupación va más allá del resultado electoral. “El problema es el día después. Como garantizar los votos en el Congreso para aprobar las reformas que faltan”, resumió otro de los empresarios consultados por LPO.
Entre las reformas, la prioridad es la laboral. La ven como la única con margen para abrir un debate amplio, incluso con parte de la oposición. “Hay que discutir las reglas de juego del trabajo. Si no, la inversión nunca va a llegar”, planteó un dirigente de la industria.
El Presidente también dejó algunas escenas que llamaron la atención. Su estilo sigue generando comentarios. “Pide que la temperatura de la sala no pase los diez grados, como si estuviera en Oslo”, ironizó un asistente, que se preguntó cual es el sentido de ponerse una campera abajo del saco y después pedir que la sala se enfríe a niveles glaciales.
El Presidente dejó algunas escenas que llamaron la atención. Su estilo sigue generando comentarios. “Pide que la temperatura de la sala no pase los diez grados, como si estuviera en Oslo”, ironizó un asistente.
Milei apareció pasado el mediodía. Lo escoltaba un enjambre de veinte custodios de traje oscuro que se movían como si esperaran una emboscada. “¿Por que no lo acompañaron a la caravana donde quedo a merced de la pedrada?”, preguntó un empresario con picardía.
En la mesa principal se acomodaron figuras del establishment como Eduardo Eurnekian, Adelmo Gabbi, Martín Rappallini, Nicolás Pino, Javier Bolzico, Alejandro Bulgheroni, Mario Grinman y la anfitriona Betina Bulgheroni.
Entre los invitados también estuvieron los empresarios más alineados con la Casa Rosada, como Juan Napoli (VALO) y Darío Wasserman, vice del Banco Nación. El almuerzo cerró sin anuncios concretos y con una conclusión repetida en los pasillos: la paciencia del mercado no es eterna y el Presidente necesita ordenar cuanto antes.
En Villa Regina poco han hecho los gobiernos de turno para sanear nuestro margen del río Negro y colaborar con la salubridad de sus aguas; dando una solución definitiva al derrame de efluentes que son vertidos con un tratamiento mínimo al río. Como si la propia desidia de infraestructura no fuera suficiente, nuestra localidad se…
Hace unos días en Villa Regina ocurrió un gran incendio en el aserradero Tapatá ubicado al pie de la barda norte, en la zona del Parque Industrial reginense, según nos contó Carlos Llanquimán, bombero especializado, fue uno de los incendios más grandes que le tocó vivir en sus 22 años de experiencia en la ciudad….
Luego de realizarle la entrevista al referente de la Junta Vecinal del Barrio La Unión sobre la situación que viven con respecto a la escasez de agua en el barrio ubicado al final del parque industrial, pudimos acceder a información desde el área de Obras Públicas a cargo del Ing. Alberto Guglielmin sobre la conexión…
En medio del destape del escándalo de corrupción en la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis), donde su nombre aparece mencionado en denuncias judiciales, Karina Milei decidió romper el silencio. Lo hizo en un acto en La Matanza, ante supuestos 8.000 “fiscales” de La Libertad Avanza, y con una frase digna de la antología del cinismo: “Vinimos para que no roben más”.
Por Ignacio Álvarez Alcorta para Noticias La Insuperable
Libertad o nada (pero con retorno)
La secretaria general de la Presidencia eligió reaparecer en un escenario político en vez de dar explicaciones sobre los audios y denuncias que la ubican como beneficiaria directa de retornos en la compra de medicamentos para personas con discapacidad. Según reveló El País, las escuchas al exdirector de Andis, Diego Spagnuolo, describen un esquema donde la droguería Suizo Argentina cobraba un 8% de retorno en los contratos, de los cuales un 3% iba directo a Karina.
Pese a ese contexto, Karina Milei prefirió aplaudir la convocatoria en redes sociales: “Más de 8.000 guerreros en el conurbano se capacitaron para fiscalizar. Así se defiende la libertad: cuidando cada voto, enfrentando al kirchnerismo y asegurando que nunca más decidan por nosotros. El cambio es en las urnas y en la calle. Libertad o nada”. Una consigna que, con los últimos acontecimientos, bien podría leerse como: “Libertad para robar, o nada”.
Los fiscales contra el robo (ajeno)
En el escenario de La Matanza no faltaron figuras de peso de la derecha, como José Luis Espert, Diego Santilli, Martín Menem y Sebastián Pareja. Todos, muy atentos al show de Karina. Lo irónico es que mientras hablaban de “cuidar cada voto” y “frenar el robo”, afuera y en los tribunales se multiplicaban las denuncias contra los propios Milei.
El abogado Gregorio Dalbón presentó una denuncia en Comodoro Py por cohecho, administración fraudulenta, negociaciones incompatibles con la función pública e infracción a la ley de Ética Pública. Allí aparecen señalados Javier y Karina Milei como beneficiarios directos, mientras que Eduardo “Lule” Menem y Diego Spagnuolo habrían oficiado de intermediarios del esquema corrupto.
Libertad, eslogan con olor a perfume barato
Resulta casi grotesco que en medio de la investigación sobre cómo se desviaban fondos de una agencia que debe garantizar medicamentos para personas con discapacidad, Karina Milei se suba al atril para gritar que vinieron “para que no roben más”. Y todavía se atreve a celebrar que su partido junte “guerreros”.
En lugar de dar explicaciones, los Milei se refugian en la épica de cartón: libertad, guerreros, batallas, votos… mientras lo que se discute en los tribunales es si armaron o no un esquema de coimas para enriquecerse con la salud de los más vulnerables.
El relato suena épico, pero la realidad es bastante más terrenal: un escándalo de corrupción que hunde cada vez más la credibilidad del gobierno libertario.
Difunde esta nota
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.