En su semana más difícil, Cristina busca voltear los pliegos de Lijo y García Mansilla para enviar un mensaje de poder
Cristina Kirchner se juega todo para voltear los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla en la sesión del Senado prevista para el próximo jueves. Senadores kirchneristas explicaron a LPO que la ex Presidenta necesita enviar un mensaje de fortaleza política a la Corte Suprema y al propio Javier Milei, que en las últimas horas la acusó de fogonear un golpe institucional por temor a terminar en la cárcel.
Este martes a las 9:30 de la mañana vence el plazo para que la ex presidenta presente un recurso de queja ante la Corte Suprema para que revise la condena en su contra de la causa Vialidad. Si su abogado Carlos Berardi se queda dormido o con consigue un taxi, quedaría firme la resolución de los jueces Diego Barroetaveña, Gustavo Hornos y Mariano Borinsky y el tribunal podría ordenar la detención de la ex presidenta.
Por eso, Cristina contestó por X este viernes los dichos de Milei, afectado por la extrema corrida y con el FMI demorándole el envío de fondois. “Saliste por radio muy… pero muuuuy sacado anunciando que voy a ir presa”, afirmó la expresidenta y agregó que el libertario “grita” eso “en perfecta coordinación con la Cámara de Casación macrista que dicta un fallo sin pruebas y sin derecho”.
Si la Corte Suprema confirma la condena antes que se inscriban las candidaturas a diputado nacional a mediados de agosto, Cristina no podría ser candidata en las legislativas de octubre. Por eso, en el Instituto Patria la tensión es total y no descartan que el máximo tribunal falle contra la expresidenta dentro de tres semanas. Ese rumor trascendió las fronteras del país y se conversa, incluso, entre los integrantes del Grupo de Puebla: el plan de Cristina es llevar el litigio a los estrados internacionales, como reveló LPO.
Cristina inicia con el Grupo de Puebla una campaña internacional ante el riesgo que la detengan
La Corte Suprema no tiene plazos para pronunciarse y, como informó LPO, Cristina había recibido mensajes que el máximo tribunal no trataría su casa hasta después de las elecciones de octubre. Sin embargo, la fragilidad financiera del gobierno por el dramático drenaje de reservas llevó a Milei a jugar la carta de la prisión de Cristina. De ahí que lograr que este jueves caigan los dos pliegos, sería un misil a la Casa Rosada y la Corte Suprema.
LPO anticipó que hasta en el radicalismo reconocen que los dos magistrados de Milei caerían en esa sesión: bastarían 37 senadores para dar inicio al debate y 25 para rechazar a los jueces. “La pelea en este momento es por el quórum y el kirchnerismo todavía no logró asegurarlo, pero si hay quórum caen Lijo y García-Mansilla”, dijo a LPO un experimentado operador judicial que sigue de cerca la pelea.

Los jueces García Mansilla, Rosatti y Lorenzetti en un encuentro con el empresario Marcelo Mindlin.
Para la Casa Rosada, sería otra traumática derrota que la oposición le barriera los pliegos y Cristina entiende que, en medio de la crisis por la criptoestafa y la corrida, no hay que darle tregua al gobierno. Pero si los libertarios rescatan a Lijo y García Mansilla, sería la ex Presidenta la que quedaría en condiciones políticas de mayor debilidad.
En el radicalismo creen que la semana que viene se caen los pliegos de Lijo y García Mansilla
Por eso, la Casa Rosada apeló a los gobernadores peronistas Gustavo Sáenz y Raúl Jalil, para que traten de garantizar que los cuatro senadores de su flamante subbloque no den quórum y si es posible sumen a algún otro. Entre los senadores aliados también logró el oficialismo ablandar posiciones, siendo el caso de la cordobesa Alejandra Vigo el más notable, que pasó de rechazar el pliego de Lijo a abstenerse.
Ante ese escenario, el interbloque de senadores de UP, liderados por José Mayans y Juliana di Tullio, emitió un comunicado para advertir que “Milei dejó al descubierto los verdaderos motivos que lo impulsaron a designar a dos miembros de la Corte Suprema de Justicia por decreto a fin de manipular judicialmente y silenciar políticamente a la presidenta del principal partido de oposición para allanar el camino y profundizar el saqueo y el ajuste”.
La estrategia kirchnerista en el Congreso estuvo coordinada. Y hasta Máximo Kirchner le dedicó al tema una publicación en Instagram: “Milei decretó que García Mansilla fuera juez de la Corte Suprema, para que junto a los dos jueces que puso Macri, también por decreto, la metan presa a Cristina. Los vimos”.
La sospecha del diputado Kirchner revela que la inquietud del Instituto Patria pasa por la coordinación que se manifestó con el Pacto de Talcahuano, entre Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y García Mansilla cuando formaron mayoría para impedirle la asunción a Lijo si no renunciaba a su cargo de juez federal. Esa acordada salió contra los deseos de Milei y Santiago Caputo, el asesor que falló en la estrategia para completar las vacantes de la Corte.