El escándalo de las coimas desploma la imagen de Milei
La crisis por el escándalo de coimas en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) ya golpea de lleno en la imagen de Milei: según un relevamiento digital, la negatividad en torno a su figura escaló al 59% de los argentinos.

Un presidente en caída libre
El estudio, realizado por la consultora Ad Hoc, analizó la conversación digital alrededor de Milei y los principales temas políticos y sociales del país. La conclusión es lapidaria: la ola de repercusiones sobre el caso que derivó en la salida del ex titular de la ANDIS, Diego Spagnuolo, no sólo no se detiene sino que crece día tras día.
Según los datos, el 21 de agosto la negatividad digital respecto a Milei alcanzó un pico del 59%, siete puntos por encima del promedio mensual.

Más ruido que en Davos
El informe subraya un dato elocuente: en apenas 72 horas, el “caso Spagnuolo” generó un volumen de menciones superior al que tuvo el discurso de Milei en Davos. La consultora incluso se pregunta: “¿El tema caerá como el caso Davos o se sostendrá en el tiempo como ocurrió con el escándalo del caso $LIBRA?”.
Las cifras marcan que los audios filtrados y vinculados al ex funcionario provocaron 243 mil menciones en sólo tres días, un verdadero tsunami digital que arrastra también a la figura presidencial.
Karina, en el ojo de la tormenta
Otro aspecto llamativo del relevamiento es la aparición de Karina Milei como una de las protagonistas de la conversación digital negativa. De acuerdo al informe, los términos “Karina” y “Spagnuolo” se ubicaron en el top 5 de las palabras más asociadas a Milei durante la última semana.
Esto confirma lo que en Noticias La Insuperable ya señalamos en otras notas: los negocios turbios en la ANDIS no son un hecho aislado, sino que tocan el corazón mismo de la mesa chica libertaria.
Una mancha que no se borra
El caso Spagnuolo, que reveló un entramado de corrupción en la compra de medicamentos destinados a personas con discapacidad, no sólo le costó la cabeza al ex titular de la agencia, sino que dejó al descubierto la falta de control político dentro del propio gobierno de Milei.
Mientras en la Casa Rosada intentan bajarle el precio al escándalo, las cifras muestran que la sociedad percibe lo contrario: desconfianza, corrupción y complicidad.
Un presidente acorralado por su propia gente
Con la negatividad digital disparada y una ciudadanía que ya asocia directamente su nombre al de los escándalos de corrupción, Milei enfrenta uno de los peores momentos desde su llegada al poder.
Lejos de las cadenas de tuits grandilocuentes o de los discursos internacionales, hoy su imagen se mide en la desconfianza de la gente. Y el veredicto es claro: la luna de miel terminó.