El Concejo Deliberante de Villa Regina aprobó el llamado a convocatoria pública para cubrir el cargo de Director del Consejo de Planificación y Acción para el Desarrollo (COPLADE).
Los interesados podrán inscribirse a partir de este lunes 19 de abril y hasta el viernes 21 de mayo de 2021 y para ello deberán completar el formulario de inscripción que podrán descargar haciendo click en el link: convocatoria COPLADE
En este link podrán encontrar también las bases y condiciones de la convocatoria y el formulario del plan de gestión.
Para información o consultas pueden contactarse a través del mail: [email protected]
Las responsabilidades del Director del COPLADE, son, entre otras: analizar las políticas, planes, programas y proyectos de los diferentes organismos nacionales e internacionales, regionales, provinciales y locales; asesorar al Concejo Deliberante de Villa Regina en la elaboración de planes, programas y proyectos de desarrollo y proponer programas de desarrollo de interés para la población local en articulación con los planes, programas y proyectos nacionales, provinciales y locales.
El Secretario de Coordinación Ariel Oliveros y el Director de Deportes Damián Álvarez recibieron a Miguel González, representante del gremio SUGARA que nuclea a los guardavidas en el país. En la oportunidad el referente sindical hizo entrega a la Municipalidad de handies y cuellos ortopédicos para la prestación del servicio durante la temporada. Cabe destacar…
A principios de este año la Municipalidad de Villa Regina, en un trabajo en conjunto en el que intervinieron la Secretaría de Obras y Servicios y las Direcciones de Cultura y de Deportes, comenzó con las tareas de mejoramiento del skatepark, espacio al que su constante uso había provocado su deterioro. El proyecto de restauración…
La Municipalidad de Villa Regina informa que actualmente NO existe ningún loteo autorizado en el sector rural. Además reitera que, según las ordenanzas vigentes, está prohibida la venta, sin previa autorización del Municipio, de lotes ubicados en terrenos sociales. Por ello, antes de realizar cualquier operación comercial se debe concurrir al edificio municipal a consultar…
La Municipalidad de Villa Regina informa que se reestableció el servicio de Balsa en Isla 58 en su horario habitual de Lunes a Viernes de 8 a 15 horas. Difunde esta nota
El Gobierno anunció el regreso al mercado voluntario de deuda con un bono en dólares bajo ley local, a una tasa del 6,5% y vencimiento en 2029. Lo que no se informó es el monto. «Lo necesario para cubrir parte del vencimiento», se limitó a decir el ministro de Economía. Los vecimientos de enero son por USD 4.500 millones.
A primera vista, la tasa luce atractiva para el gobierno nacional: más baja que la que consiguió la Ciudad de Buenos Aires 7,8% y Santa Fe 8%, e incluso inferior al promedio que pagaron las empresas en sus obligaciones negociables, por encima del 8,5%.
Tras el anuncio, los bonos soberanos en dólares subieron cerca del 2% y el riesgo país cerró en 623 puntos, una baja de 11 unidades equivalente al 1,7%. El movimiento alivió tensiones, pero no borró la cautela.
El economista Christian Buteler aclaró un punto clave: «Que el bono tenga un cupón del 6,5% no implica que esa sea la tasa que pagará la Argentina. La tasa depende del precio al cual se coloque el bono; según ese precio, podrá ser mayor, igual o menor al 6,5%.» Es decir, la tasa real no está definida: el número difundido por el Gobierno es apenas una referencia optimista
Desde Adcap señalaron que «hay mucha especulación sobre el tamaño de la emisión. El Gobierno probablemente opte por un volumen considerable antes que una colocación ajustada en rendimiento, porque la alternativa del repo podría no resultar tan económica».
En el mercado se comenta que Caputo ya tiene la colocación acordada con jugadores locales. «Aprovecha el boom de ingresos de dólares por el impulso de ON y le pide a las empresas que hagan patria», explicó un operador a LPO.
Que el bono tenga un cupón del 6,5% no implica que esa sea la tasa que pagará la Argentina. La tasa depende del precio al cual se coloque el bono; según ese precio, podrá ser mayor, igual o menor al 6,5%.
Caputo vendió la operación como el «retorno al mercado de capitales», pero los operadores lo leen distinto. Para muchos, es una jugada para alimentar expectativas y abrir, en algún momento, la canilla del financiamiento externo. «A esta apuesta entran los jugadores locales; por eso se habla de un monto chico», agregó la fuente. Algunos estiman una emisión de apenas USD 1.000 millones.
El Gobierno vendió la épica del «regreso a los mercados internacionales», para que pareciera que Argentina volvía a jugar en la cancha grande. Hoy se cayó el decorado: no había mercado internacional, ni colocación global, ni bancos extranjeros. Afuera no prestan ni lo mínimo sin garantías pesadas. Piden colateral, más tasa y no aseguran el monto. ¿Qué hicieron entonces? Una nueva emisión de dólares adentro, como fueron los Bonte de mitad de año cuando consiguió USD 850 millones, donde los compradores son de la casa.
Sobre los compradores «de la casa», Hernán Letcher reveló otro mecanismo detrás del «éxito»: «De cara a la licitación del próximo miércoles se publicó una resolución que permite a las aseguradoras endeudarse en dólares a tasa baja (caución) para usar esos fondos en la licitación y mostrar una demanda inflada.» Una maniobra hecha a medida. Para las aseguradoras, un negocio redondo.
El analista Andy Spinelli completó el cuadro: «Para colmo, hay bonos como el AL29 que pagan renta en enero y cotizan al 11% de tasa nominal anual. ¿Tiene sentido colocar nuevos bonos bullet al 7/9% pudiendo comprar un AL29 con más rendimiento y pago semestral?» Todo encaja: la épica del retorno se sostiene sobre ingeniería interna, arbitrajes contables y el mismo circuito cerrado de financiamiento público.
En diciembre de 1945, una decisión política cambió para siempre la relación entre el trabajo y el Estado en la Argentina. El aguinaldo no nació como beneficio ni regalo: fue una conquista obrera institucionalizada por el peronismo, resistida por el poder económico y defendida en la calle.
Por Alcides Blanco para NLI
El 20 de diciembre de 1945, fecha de la que hoy se cumplen ocho décadas, el gobierno surgido de la Revolución del ’43 firmó el Decreto N.º 33.302/45, que creó el Sueldo Anual Complementario (SAC). La medida fue impulsada desde la Secretaría de Trabajo y Previsión por Juan Domingo Perón, cuando todavía no había sido electo presidente.
Aquella decisión no fue técnica ni neutra. Fue profundamente política: reconocía que el salario no alcanzaba solo para reproducir la fuerza de trabajo, y que el Estado debía intervenir para equilibrar una relación históricamente desigual entre capital y trabajo. Por primera vez, el ingreso anual del trabajador pasaba a ser un asunto de política pública.
El decreto que desató la furia patronal
El Decreto 33.302/45 establecía el pago de un salario adicional anual, equivalente a la doceava parte de lo percibido durante el año. La reacción del empresariado fue inmediata y feroz. Las cámaras patronales denunciaron que el aguinaldo era “confiscatorio”, “inviable” y “demagógico”. Los grandes diarios de la época editorializaron contra la medida y auguraron caos económico.
La respuesta vino desde abajo. Miles de trabajadores salieron a la calle para defender el decreto, en un clima político todavía marcado por la reciente liberación de Perón tras el 17 de Octubre. El aguinaldo se transformó así en algo más que un ingreso extra: se convirtió en un símbolo del nuevo pacto social que estaba naciendo.
No es un dato menor que el aguinaldo haya sido creado antes de la presidencia formal de Perón. Eso explica por qué su origen está ligado a la Secretaría de Trabajo y Previsión y no a una ley del Congreso: el poder real de esa política no estaba en los despachos, sino en la organización obrera.
De conquista a derecho permanente
Ya con Perón en la Presidencia, en 1946, el aguinaldo fue ratificado por ley e incorporado de manera definitiva al sistema laboral argentino. A partir de allí, ningún gobierno pudo eliminarlo sin enfrentar un enorme costo político y social.
Con el tiempo, el Sueldo Anual Complementario pasó a abonarse en dos cuotas, en junio y diciembre, como rige actualmente. Esa modificación administrativa no alteró su esencia: el reconocimiento de que el salario mensual no agota el valor del trabajo realizado durante el año.
Durante las dictaduras y los períodos neoliberales, el aguinaldo fue atacado indirectamente: licuado por la inflación, precarizado mediante empleo informal o directamente negado a millones de trabajadores excluidos del sistema. Pero incluso en esos contextos, el derecho nunca fue derogado, lo que habla de su profunda legitimidad social.
Ocho décadas después, el sentido sigue en disputa
A 80 años de su creación, el aguinaldo vuelve a ser cuestionado, esta vez desde discursos que lo presentan como “un costo”, “una carga” o “un privilegio”. Es el mismo lenguaje patronal de 1945, reciclado con estética libertaria y retórica antisindical.
Recordar el origen del aguinaldo no es un ejercicio nostálgico. Es una advertencia histórica: los derechos laborales no nacen del mercado ni de la buena voluntad empresaria. Nacen de decisiones políticas respaldadas por organización popular.
El aguinaldo fue, y sigue siendo, una frontera. De un lado, quienes creen que el trabajo es una mercancía más. Del otro, quienes sostienen que sin justicia social no hay democracia posible.
Ochenta años después, la pregunta no es si el aguinaldo “se puede pagar”. La verdadera pregunta es qué tipo de país se quiere construir.
Difunde esta nota
Un comentario
Son claros y revisable los conceptos de olvido .Me desestructuran y hacen revisar. LO DE LA CONFIANA NACIONAL creí qe era mayor
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.
Son claros y revisable los conceptos de olvido .Me desestructuran y hacen revisar. LO DE LA CONFIANA NACIONAL creí qe era mayor