El conflicto que se agrava en el hospital Garraham está generando un efecto dominó en otros centros de salud a cargo de la Nación, donde los médicos también profundizan las medidas de protesta para visibilizar el fuerte ajuste del gobierno de Javier Milei en Salud.
Ahora, estalló la crisis en el hospital público más grande del país, el Posadas, donde los 600 residentes definieron un paro sin guardia para el próximo martes, en caso de no tener respuestas del Ministerio de Salud a cargo de Mario Lugones.
En concreto, denuncian un recorte presupuestario que impacta directo en sus salarios. Un residente de primer año del Posadas cobra 797 mil pesos por mes, con una carga horaria de más de 70 horas semanales, sin bono compensatorio.
Este miércoles, el Gobierno ofreció un bono no remunerativo de 300 mil pesos, lo que fue rechazado de plano por los residentes que piden un aumento al básico y que, en asamblea, decidieron sostener la medida de fuerza anunciada para la semana que viene, además de analizar la unidad de acción con los residentes del Garraham.
También, reclaman el recupero de costos que se hace a partir de obras sociales y prepagas que lo cobran trimestralmente todos los profesionales del hospital pero que a los residentes se los habían quitado, medida que fue tomada como un “castigo”.
El Posadas es un hospital de alta complejidad que se busca tercerizar y privatizar, que está sufriendo el desguace. Se están yendo al sector privado especialistas de altísimo nivel que renuncian al hospital, lo que deja a la población sin determinados especialistas, entre ellos oncólogos
“Ya veníamos reclamando por los 120 despidos que se dieron acá desde julio del año pasado. Este Gobierno no nos atendió nunca, recién la semana pasada logramos una reunión con el director”, dijo a LPO la titular del gremio Cicop en el Posadas, Mirtha Jaime.
Y agregó: “El Posadas es un hospital de alta complejidad que se busca tercerizar y privatizar, que está sufriendo el desguace. Se están yendo al sector privado especialistas de altísimo nivel que renuncian al hospital, lo que deja a la población sin determinados especialistas, entre ellos oncólogos”.
Con más de 70 mil metros cuadrados de superficie cubierta, el Posadas, ubicado en El Palomar, atiende a 10 mil personas por día y es un efector de salud determinante para el conurbano oeste y un centro de derivación de muchas especialidades.
Una diputada de Milei provocó a los médicos del Garrahan: “pueden vivir con 360 mil pesos”
Dentro del equipo de salud de más de 5 mil trabajadores, no se está dando la prórroga para quienes se quieren quedar más años y hay un hastío de las condiciones laborales. “Yo tengo 30 años acá y todavía soy contratada”, dijo Jaime.
Y agregó: “Cuando hay un plan de achicamiento, las disposiciones del presupuesto varían y las prioridades también. Entonces, hay un resonador roto que demora más de lo debido, hay que esperar a licitaciones. Estuvimos bastantes meses en el verano sin aire acondicionado porque no aceptaban una licitación y los pacientes se desmayaban del calor”.
Sobre los dichos de la diputada Juliana Santillán, que provocó a los médicos diciendo que “pueden vivir con 360 mil pesos”, Jaime dijo: “No sé por qué mirilla mira el mundo. Es no tener inteligencia emocional y política y es tener intereses claros”.
Con más de 70 mil metros cuadrados de superficie cubierta, el Posadas, ubicado en El Palomar, atiende a 10 mil personas por día y es un efector de salud determinante para el conurbano oeste y un centro de derivación de muchas especialidades.
Además de la denuncia por los más de 120 despidos, en el Posadas los trabajadores acusan un déficit de recursos esenciales para garantizar el servicio y una creciente salida de profesionales que abandonan el hospital frente a la constante caída del poder adquisitivo de los salarios.
Por eso, los residentes de ese hospital están exigiendo que Lugones abra una mesa de diálogo para tener respuestas a la situación crítica que -señalaron en un comunicado- “pone en riesgo tanto nuestra subsistencia como la calidad de atención que brindamos”.
Además, advierten que la situación es similar en otros hospitales nacionales de relevancia como El Cruce, de Florencio Varela, y el Sommer, de General Rodríguez, donde también se registraron despidos.