Sociedad

  • El escándalo Vaudagna ahora amenaza a un hombre cercano a Lorenzetti

     

     Año 1984, finales de la Liga Rafaelina, juegan Sportivo Norte y Atlético Rafaela. El zaguero de habilidades modestas pero muy recio en la marca recibe un lateral en su campo, avanza unos metros y mete una volea de derecha. La pelota se clava en un ángulo. Gol de media cancha. En los barrios Villa Dominga y Barranquitas, donde está la cancha de Sportivo, todavía lo están gritando.

    Ese número dos corpulento y de juego intenso dejó el fútbol cuando debió optar entre los botines y la carrera de contador en la Universidad Nacional del Litoral en Santa Fe. Se recibió e hizo carrera política en Rafaela. Hasta que en 2003 un recién designado ministro en el máximo tribunal argentino, de la misma ciudad, lo impulsó para llegar a Administrador General de la Corte Suprema. Desde ese cargo durante 15 años manejó los fondos del Poder Judicial y construyó un robusto poder personal. Hasta que en 2023 una interna palaciega lo dejó fuera de juego.

    Como en los días lluviosos de sus tiempos como defensor central Héctor Daniel Marchi vuelve a jugar en cancha embarrada. Un ex director regional de la ex AFIP que está imputado junto a un ex juez federal y a un financista rosarino en una extorsión acaba de declarar como arrepentido que el ex administrador general de la Corte era quien estaba más interesado en que la maniobra se concretara y descargaba presiones para eso.

        Vaudagna reconoce que armaron una causa judicial contra el empresario bursátil rosarino Claudio Iglesias en un asado en la casa del ex juez federal Marcelo Bailaque y ahora, en una declaración ampliatoria agregó  que Héctor Marchi empujaba el armado de ese maneje   

    El ex director regional de la AFIP de Rosario Carlos Andrés Vaudagna reconoce que armaron una causa judicial contra el empresario bursátil rosarino Claudio Iglesias en un asado en la casa del ex juez federal Marcelo Bailaque. Ante media docena de fiscales federales agregó recientemente, en una declaración ampliatoria como imputado colaborador, que Héctor Marchi empujaba el armado de ese maneje.

    El hombre que fue extorsionado es Claudio Iglesias. Vaudagna dijo que el chantaje se concretó a sabiendas de que en esos días del año 2019 Iglesias aspiraba a disputar la presidencia de la Compañía de Seguros San Cristóbal, con sede central en Rosario, de la que era directivo. La imputación penal contra Iglesias fue en noviembre de 2019, incluyó allanamientos y enterró sus aspiraciones de presidir la aseguradora. La causa la impulsaba el ex juez Bailaque quien hoy está imputado formalmente de extorsión por ese caso junto a Vaudagna y al financista rosarino Fernando Whpei, ambos presos en su domicilio con tobillera electrónica.

    Lo que confiesa ahora Vaudagna es que en la cocina de esa extorsión, cuya participación admite, estaba Marchi descargando presiones para concretarla. El financista Whpei admite haber cobrado 160 mil dólares que pagó Iglesias en cinco cuotas para que paralizaran la causa en su contra. Dos años después de iniciada, y con los pagos realizados, Bailaque le dictó la falta de mérito a Iglesias.

    Lo que se refuerza en la declaración con la que Vaudagna hunde a Marchi es el interés que había en Buenos Aires para que el chantaje se realizara. Eso lo dice de manera contundente Santiago Busaniche quien urge a Vaudagna con una decena de mensajes a que se apresuren en la extorsión. Busaniche es un escribano santafesino afincado hace 25 años en Buenos Aires, que vive en el Palacio Paz frente a la Plaza San Martín, un lobista ligado a los máximos niveles de la Justicia Federal de la Nación y a los servicios de inteligencia, que acaba de ser imputado por esta extorsión en Rosario.

     Lo que confiesa ahora Vaudagna es que en la cocina de esa extorsión, cuya participación admite, estaba Marchi descargando presiones para concretarla. El financista Whpei admite haber cobrado 160 mil dólares que pagó Iglesias en cinco cuotas para que paralizaran la causa en su contra. Dos años después de iniciada, y con los pagos realizados, Bailaque le dictó la falta de mérito a Iglesias. 

    Marchi es de Rafaela al igual que Ricardo Lorenzetti que fue el artífice de su llegada al cargo de administrador general de la Corte, un puesto vital en el manejo de los recursos del Poder Judicial. Manejó ese cargo como un hombre poderoso, controlando una caja multimillonaria por la que muchos le deben favores, hasta que en 2023 fue desplazado con la resistencia en soledad de Lorenzetti.

    Un hombre de bajo perfil, práctico, inteligente y formado. En Sportivo Norte, el mismo del que era simpatizante el después gobernador Omar Perotti, se enfrentaba en la liga al Atlético donde jugaba Gustavo Alfaro, técnico campeón con Boca y hoy entrenador de Paraguay.

    El ex juez Marcelo Bailaque

    En su carrera política fue secretario de Hacienda de la Municipalidad de Rafaela durante la gestión de Ricardo Peirone, un administrativista especializado, que fue un puntal en la formación de Marchi. Después fue secretario de Hacienda en el segundo gobierno de Jorge Obeid. Hasta que recaló en Buenos Aires poco después de que Kirchner designó a Lorenzetti en la Corte Suprema.

    En una serie de audios encontrados en un teléfono secuestrado a Vaudagna, Busaniche manifiesta un interés extremo en que se avance con informes oficiales contra el agente de Bolsa Claudio Iglesias y que posteriormente se realicen allanamientos en su contra. Le pide que hable con Marcelo Bailaque. «Me dijo ayer Marcelo que hoy te veías con él, ¿puede ser? Trata de verlo, de darle hoy mismo algo y que te defina una fecha porque te juro que no aguanto más la presión, no aguanto la temperatura, Carlitos, dame una mano con esto. Te agradezco mucho, avísame por favor», le dice Busaniche.

     [Los audios que revelan la presión de un lobista judicial para extorsionar a un agente bursátil de Rosario

    El fiscal jefe de la Procuración de Investigaciones Administrativas, Sergio Rodríguez, le preguntó a Vaudagna de quién venía esa presión que agobiaba a Busaniche. «Escuchando el audio la presión es de Marchi», respondió Vaudagna. Luego agrega Vaudagna que Marchi era el interesado en que avanzara «ese tema». Ese tema es una extorsión y tiene tres imputados: un ex jefe de la AFIP, un ex juez federal y un financista rosarino muy conectado con el mundo político. Ahora hay un cuarto que es Busaniche. Pero según Vaudagna el que presionaba a Busaniche para avanzar con la causa armada que lo dejaría al empresario Iglesias fuera de la carrera por San Cristóbal, además de imponerle un chantaje por dinero, había sido Marchi

    Marchi fue una persona expuesta en los últimos años a objeciones públicas. En 2016 Elisa Carrió denunció a Marchi y a Lorenzetti por supuesto enriquecimiento ilícito, pero Marchi quedó desvinculado judicialmente de esa acusación por inexistencia de delito. Tras eso, Marchi inició una demanda civil contra Carrió. En febrero de 2024 la Corte falló en favor de Carrio ya que hizo la denuncia en su condición de legisladora para lo cual está habilitada.

    Para los investigadores locales, Marchi es un arma de doble filo en la causa que investigan. Les interesa centralmente porque ofrece una línea pensable para una incógnita nunca despejada, que es por qué razón en Buenos Aires estaban tan notoriamente interesados en montar una celada contra el empresario bursátil. Parece poco que fuera para sacarle los 160 mil dólares que dice haber pagado. Pero al mismo tiempo entienden que avanzar en esa dirección es proponerles a los gavilanes de Comodoro Py una punta para arrebatarles la causa y llevarla para los Tribunales de Retiro. Como hicieron con Lago Escondido, manoteada a la Justicia de Bariloche para sepultar el caso y despegar a todos.

     [Imputan al rugbier ligado a los servicios por el caso que acorraló al juez Bailaque

    Vaudagna es un imputado que busca salvarse. Lo que dijo de Marchi puede ser un engaño. Pero tiene como colaborador el compromiso jurado de decir la verdad y se expone a perder los beneficios de la reducción de pena si se descubre que mintió en algo.

    La alusión a Marchi desnuda el importante nudo político, de influencias, de prosperidad y de oscuridades que es esa ciudad de 100 mil habitantes del centro oeste santafesino. Rafaela. Donde hablar en los medios de Marchi, Lorenzetti o algunas referencias fuertes puede tener un alto costo para los que se atrevan en términos de mantener el oficio. Sobre esas zonas cubiertas de sombras se insinúa en estos casos que hay mucho por hablarse.

     

  • Milei explicó por qué no compra reservas: «Si el Banco Central compra dólares, sube la inflación»

     

    Javier Milei dio una charla de mas de una hora para

    explicar en detalle por qué su gobierno no acumula reservas. Fue una inusual ventana al pensamiento presidencial, que fue soslayado por la mayoría de los medios. Pero bien mirado fue fascinante porque puso en escena una batalla íntima. Un choque entre el dogma libertario y el pragmatismo de quien gobierna. 

    El hilo conductor fue claro: Milei no quiere que el Banco Central compre dólares porque eso empuja el tipo de cambio y, cuando sube el dólar, suben los precios. Ese es el corazón del asunto. El problema es que su manual libertario no puede explicar ese pase inmediato del dólar al resto de los precios. Ahí nace el choque entre el dogma y el Milei que gobierna.

    Ahí aparecen el Banco Central, las bandas, el «pisar» el tipo de cambio y, después, largas excursiones teóricas para justificar lo que hace el Estado que él mismo dijo que iba a destruir. 

    Barclays durísimo con Caputo: Argentina no crece, las reservas están peor que antes de Milei y la deuda aumentó 

    En el inicio de su charla en el evento de El Cronista de este miércoles, reconoció algo central: un superávit no es la panacea contra la inflación. Lo dijo sin rodeos, asumiendo límites que su propia escuela teórica suele negar. «Podríamos haber hecho el ajuste fiscal, poner las cuentas en orden, y podría haber habido igual una hiperinflación». Es una frase clave porque reconoce que la inflación no es en todos los casos un fenómeno monetario. 

    En cada tramo de su exposición, Milei fue cambiando de piel. El Milei economista arrancó la charla defendiendo su idea de que no existe un «tipo de cambio de equilibrio». Citó su propia teoría de sistemas y la incapacidad de los economistas para resolver el «vector» que determina precios relativos: 

    «Por lo tanto, cualquier apreciación que hagan sobre el tipo de cambio es una tontería», afirmó y bautizó como «oráculos de Delfos» a los economistas y consultoras que reclaman una devaluación o piden acumular reservas. 

    Cada vez que ustedes tengan a un oráculo de Delfos llamando a la devaluación, yo les preguntaría por qué quieren favorecer a un conjunto de delincuentes que no quieren competir, para empobrecer a la mayoría de los argentinos.

    «Cada vez que ustedes tengan a un oráculo de Delfos llamando a la devaluación, yo les preguntaría por qué quieren favorecer a un conjunto de delincuentes que no quieren competir, para empobrecer a la mayoría de los argentinos», dijo, calcando los argumentos económicos del kirchnerismo.

     Milei presidente explicó que no acumula reservas porque hacerlo obligaría al Banco Central a emitir pesos para comprar dólares, y esa emisión haría subir los precios. «Si el Banco Central sale a comprar dólares, aumenta la cantidad de dinero y eso genera inflación. Es decir, el impuesto a los pobres», explicó. 

    En ese gesto está la fractura: el economista puede sostener que el dólar es un precio más; el presidente sabe que, en la Argentina, es el precio madre. Por eso Milei no quiere que el Central compre reservas: porque cada dólar adicional puede generar un tipo de cambio más alto y, con él, un nuevo salto de precios. Es un razonamiento pragmático que lo obliga a hacer justo lo contrario de lo que dictan sus manuales. 

    El Milei economista rechaza toda intervención del Estado. El presidente, en cambio, se aferra a las bandas cambiarias para mantener controlada la volatilidad: «Las bandas están para ponerle un límite a la volatilidad», dijo. Es decir: el libertario administra el precio del dólar con las mismas herramientas que usaban los gobiernos que él acusa de «socialistas». 

    Ahí también aparece un punto de contacto con el kirchnerismo: la idea de que el tipo de cambio es una variable política que puede y debe ser administrada.

     La explicación teórica que dio para justificarlo fue un laberinto de referencias a «vectores», «modelos de equilibrio general» y «precios relativos», con apelaciones a «lo cóncavo» y lo «convexo». Una tentativa de convertir el control en teoría. En la práctica, se trata de un dólar pisado. 

    Pero hubo otro punto de contacto fuerte con el kirchnerismo: Milei presidente fue muy explícito al subestimar la necesidad de acumular reservas.  «Si yo tengo rollover, ¿qué es eso de tener que acumular reservas para pagar? Si los intereses los pago con equilibrio fiscal y la deuda la rolleo en el mercado, ¿de qué están hablando?». 

    El argumento es simple: mientras el mercado refinancie, no hace falta acumular dólares, porque no hay nada que pagar, y los intereses se cubren con superávit. Excepto, que Milei necesitó dos rescates externos de USD 20 mil millones cada uno -FMI y Tesoro – para sobrevivir al último año.

    Si yo tengo rollover, ¿qué es eso de tener que acumular reservas para pagar? Si los intereses los pago con equilibrio fiscal y la deuda la rolleo en el mercado, ¿de qué están hablando?» El argumento es simple: mientras el mercado refinancie, no hace falta acumular dólares, porque no hay nada que pagar.

    «Los que me están pidiendo que compre reservas me están pidiendo que arruine la vida a los argentinos. ¿Nos parece justo comprar artificialmente un seguro arruinando a los que menos tienen?», afirmó. Ese registro, de justicia social, de advertencia sobre el costo de la inflación en los pobres, la idea de un conjunto por sobre lo individual, lo acercó, una vez más, a la retórica kirchnerista  

    Milei puso así sobre la mesa que la acumulación de reservas garantizada por una devaluación pulveriza ingresos en pesos, por lo tanto a los asalariados. Pero tampoco ocultó que el modelo de dólar barato destruye el empleo. «Tiene un efecto distributivo, si. Bueno, discutamos eso», propuso el presidente economista. El problema es que el componente distributivo no protagoniza ninguna narrativa. 

    «La destrucción de empleo es parte de la reconversión productiva. Hay sectores que van a desaparecer, pero otros van a surgir», afirmó, retomando la línea neoliberal clásica.  

    Sobre el final lo envolvió en una reflexión casi metafísica: «Los países tienen vida infinita», dijo. Una afirmación muy discutible. La historia reciente está llena de países que dejaron de existir. Einstein decía que  «Dos cosas son infinitas: la estupidez humana y el universo; y no estoy seguro de lo segundo». 

     

  • Perotti piensa pelear la gobernación en 2027 luego de la derrota de Provincias Unidas

     

     El resultado de octubre, que relegó a un cómodo tercer lugar a la candidata del gobernador Maximiliano Pullaro inyectó una dosis de optimismo importante en Hacemos Santa Fe, la agrupación que lidera Omar Perotti que comenzó a caminar la provincia con la mira en el 2027.

    «Empezamos en el subsuelo y ahora estamos levantando todos los meses», dijeron fuentes de su entorno que miden mes a mes la imagen del ex gobernador y se entusiasman con los encuentros que viene encabezando de lo que participa su equipo. Este viernes, bajo el sol inclemente de los primeros calores de la temporada, se reunieron en el sindicato de Luz y Fuerza de Rosario con especialistas en Inteligencia Artificial.

    «Omar está caminando, está reuniendo a su equipo y se puso como objetivo competir en 2027», admitió una fuente muy cercana al ex gobernador. La derrota de Provincias Unidas y un resultado muy por debajo de lo esperado de Fuerza Patria que hizo la peor elección del peronismo en años en la provincia de Santa Fe, convencieron al rafaelino.

     La derrota de Provincias Unidas y un resultado muy por debajo de lo esperado de Fuerza Patria que hizo la peor elección del peronismo en años en la provincia de Santa Fe, convencieron al rafaelino 

    En su equipo dicen que el radical Maximiliano Pullaro hizo campaña con el discurso productivista de Perotti, «podríamos reclamar los derechos de autor», bromean. Sin embargo, aseguran que a diferencia de Pullaro, Perotti se preparó por años: «lo de Maxi son eslóganes, pero no conoce el entramado industrial y productivo y eso se nota, lo notan los empresarios», comentaron.

     [El peronismo rechazó armar un bloque con Monteverde y le complica la carrera a la intendencia de Rosario]

    Lo cierto es que Perotti que aportó los votos necesarios para habilitar la reforma constitucional que le permite competir a Pullaro por la reelección, ahora se anota para enfrentarlo en 2027. Con ese objetivo mantuvo reuniones para acomodar el PJ. En el peronismo dicen que el ex gobernador se va a instalar para volver a la Casa Gris o para pelear la senaduría.

    El equipo de Perotti saca pecho por haber insistido dentro del partido en resolver las candidaturas garantizando la participación de todos los sectores, entre ellos, Hacemos que postulaba a Roberto Mirabella, pero quedaron afuera: «Queríamos que sea una decisión acordada pero no hubo ganas», sostienen.

    Perotti encabezó el encuentro de jóvenes en el camping de Luz y Fuerza en Rosario

    En el perottismo apuntan al senador Armando Traferri como el armador de la lista de Fuerza Patria que terminó encabezando la dirigente de Ciudad Futura Caren Tepp y la secundo Agustín Rossi, aliado a Traferri, y que dejó a fuera a varios sectores del peronismo provinicial como al Movimiento Evita que ahora le complicó a Monteverde su carrera a la intendencia, como anticipó LPO.

    El ex gobernador ocupa una banca en la cámara de Diputado provincial y mantiene el perfil bajo pero activo. Su bloque de cinco legisladores compuesto por ex ministros de su gestión fue el más productivo en materia legislativa, subrayaron fuentes de Hacemos Santa Fe en diálogo con LPO:

    «Estamos preparando equipos jovenes porque cuando nos hicimos cargo de la provincia estaba todo detonado y con los cuadros técnicos del peronismo oxidado por haber estado afuera del poder durante doce años».

     

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    Hallazgo en Egipto: 225 estatuillas revelan la identidad perdida de un faraón

     

    Un equipo francés encontró 225 ushabtis en posición original dentro de una cámara funeraria de Tanis. El hallazgo permitió identificar un sarcófago anónimo como perteneciente a Sheshonq III, uno de los faraones más enigmáticos de la Dinastía XXII.

    Por Alcides Blanco para NLI

    Un tesoro de 225 estatuillas funerarias fue descubierto dentro de una tumba en la antigua capital egipcia de Tanis, en el delta del Nilo, informó el Ministerio de Turismo y Antigüedades de Egipto.

    Una tumba saqueada que escondía un tesoro intacto

    La necrópolis de Tanis, famosa por sus tumbas saqueadas desde la Antigüedad, volvió a sorprender al mundo. En un sector que se creía completamente estudiado, la misión arqueológica francesa dirigida por especialistas de larga trayectoria encontró 225 estatuillas funerarias cuidadosamente enterradas bajo capas de limo. Ese detalle —la preservación exacta del lugar original— es un milagro arqueológico en un sitio castigado por siglos de saqueo y movimientos de tierra.

    Las piezas, de tonos azules y con inscripciones reales finamente marcadas, se encontraban al interior de una cámara asociada a Osorkon II, pero el contexto del hallazgo volcó todas las miradas hacia otro misterio que lleva décadas sin resolverse: un sarcófago de granito completamente anónimo hallado años atrás en la misma área.

    La sorpresa llegó con los cartuchos reales grabados en varias de las estatuillas: pertenecían al faraón Sheshonq III, gobernante de la Dinastía XXII, cuyo lugar de entierro había sido motivo de especulación durante más de un siglo. Con esa evidencia en mano, el equipo concluyó que el sarcófago anónimo —grande, pesado, pero inexplicablemente sin inscripciones— correspondía, en realidad, a este faraón.

    Sheshonq III: el “rey sin tumba” que recuperó su identidad

    Las estatuillas, conocidas como ushabti, eran consideradas sirvientes mágicos que asistirían al difunto en su vida en el más allá. Que un conjunto tan numeroso haya aparecido completo, agrupado y en posición original no solo es un acontecimiento inusual: es una pieza fundamental para reconstruir las prácticas funerarias del período libio.

    La Dinastía XXII, marcada por conflictos internos, traslados de tumbas y luchas por el poder, dejó a muchos faraones en posiciones históricas borrosas. Sheshonq III, en particular, quedó registrado en las inscripciones oficiales pero sin una tumba claramente identificada. Por eso, este hallazgo no solo llena un vacío arqueológico: corrige una omisión histórica.

    La presencia de más de doscientas figuras vinculadas a su nombre refuerza la teoría de que los restos del faraón pudieron haber sido trasladados durante un período de inestabilidad para resguardar su ajuar funerario. Que las estatuillas hayan sobrevivido a saqueos y mudanzas internas es casi un acto de resistencia arqueológica.

    Qué cambia en la historia del Antiguo Egipto

    El hallazgo obliga a revisar buena parte del mapa funerario de Tanis. Allí, a diferencia del Valle de los Reyes, la mayoría de las cámaras reales llegaron destruidas o saqueadas. Por eso, recuperar un conjunto tan numeroso y original es un evento excepcional.

    Pero el impacto va más allá de lo material:

    • Permite identificar con certeza un sarcófago que llevaba décadas sin dueño.
    • Confirma el nivel de complejidad ritual de la Dinastía XXII.
    • Abre un nuevo capítulo sobre cómo se movían, escondían y protegían los bienes reales en épocas de crisis.
    • Y desmonta la idea de que Tanis ya no tenía nada nuevo para ofrecer.

    En palabras de los propios arqueólogos —integradas en sus informes—, este es el hallazgo más importante en Tanis desde mediados del siglo pasado.

     

  • Escándalo en José C. Paz: trompadas y sillazos en medio de la jura de concejales

     

    Una gresca de proporciones, con trompadas y sillazos, se desató este viernes durante la jura de los nuevos concejales en José C. Paz.

    A poco de finalizar un acto cargado de tensiones entre el oficialismo local alineado a Mario Ishii y la oposición libertaria, los cruces se trasladaron a las inmediaciones del recinto y el hall del Concejo, donde volaron sillas y proliferaron puñetazos entre militantes de ambos espacios.

    En medio del descontrol, el intendente Mario Ishii tomó el micrófono para reclamar calma y orden. Pero la batahola era tal que hasta dentro del propio recinto concejales de un lado y otro discutían a los gritos sin escuchar la voz del caudillo.

     Se trataba de una sesión de jura especial y con un nutrido marco de militancia, ya que se trataba de la ceremonia previa a la salida de la intendencia de Ishii, quien asume su banca en el Senado bonaerense.

     «Lo que pasa es que esta señora, señorita o no sé qué es, dijo que lo iba a rajar de patadas en el culo al intendente. Es la que genera esto afuera del recinto», dijo en medio de la gresca la concejal de Ishii Lorena Ramírez, que acusó a la libertaria Mía Amoroso por haber desatado el caos.

    «Es una locura que se genere violencia porque yo grite ‘Viva la libertad carajo'», dijo la concejal libertaria Mia Amoroso al portal local Dar Info en pleno recinto, donde la concejal de Ishii Lorena Ramírez intervino en el reportaje para acusarla de provocar.

    «Lo que pasa es que la señora, señorita o no sé qué es, dijo que lo iba a rajar de patadas en el culo al intendente. Es la que genera esto afuera del recinto», dijo Ramírez, al apuntar directo a la libertaria Amoroso como la generadora del caos.

    Amoroso denunció en redes un «ataque» de militantes y prometió hacer una denuncia en fiscalía. «A uno le fracturaron la mandíbula, a otra la arrinconaron entre hombres y la molieron a palos», dijo.

    En el oficialismo local acusan a la concejal libertaria de haber provocado con gesticulaciones en las intervenciones de concejales de Ishii y de haber fogoneado a la militancia libertaria para ir al choque en medio de una multitudinaria presencia de militantes oficialistas.

     

  • Valdés busca un interbloque con Provincias Unidas para impedir que Jaldo y Sáenz le saquen la tercera minoría

     

    Gustavo Valdés impulsa la idea de que la bancada de la UCR en el Senado termine formando un interbloque con los legisladores que responden a los gobernadores de Provincias Unidas (PU). Esa jugada podría servir para neutralizar los planes de los peronistas Osvaldo Jaldo y Gustavo Sáenz, que tratan de acercarse a senadores como la neuquina Julieta Corroza, la cordobesa Alejandra Vigo y hasta los misioneros Carlos Arce y Soña Rojas Decut para quitarle la tercera minoría a los radicales.

    La maniobra apunta a que los 10 senadores radicales puedan imponerse por volumen sobre sus pares de PU, que quedaron dispersos en monobloques o bloques pequeños después de la elección de octubre. La pulseada es para quedarse en el podio, detrás de los 22 que lidera José Mayans y los 20 libertarios de Patricia Bullrich.

    En efecto, la UCR contará a partir del 10 de diciembre con más bancas que Martín Llaryora, Maximiliano Pullaro, Ignacio Torres y Claudio Vidal. El cordobés puede acreditar ascendencia sobre Alejandra Vigo, a través de su acuerdo con Juan Schiaretti, mientras que el chubutense hace lo propio con Edith Terenzi y el santacruceño con José María Carambia y Natalia Gadano. Es decir, a lo sumo, cuatro legisladores.

    Sobre todo, porque a los armadores que se disputan el fichaje de senadores les resulta muy difícil imaginarse la incorporación de los santacruceños.

    Los gobernadores peronistas y Provincias Unidas exploran un interbloque federal en el Senado para ser tercera minoría

    El inconveniente más grande es que Pullaro tiene a Carolina Losada y Carlos Galaretto dentro del bloque radical, igual que Valdés al jefe de la bancada, Eduardo Vischi, y Mercedes Valenzuela. El jujeño Carlos Sadir, por su parte, no ganó ninguna de las tres bancas en disputa en las elecciones de 2023, que terminaron con el ingreso a la Cámara Alta de los libertarios Ezequiel Atauche y Vilma Bedia y el desembarco de la peronista Carolina Moisés por la minoría.

    Ese reparto le permite a Valdés ensayar en el Senado una estrategia distinta a la que implementó en Diputados, donde dispuso que su ministro de Desarrollo Social y legislador electo, Diógenes González, permanezca en el bloque de la UCR, liderado ahora por Pamela Verasay.

    Maximiliano Abad, en el Senado.

    Fuentes parlamentarias deslizan que esa maniobra obedecería a un acuerdo entre el correntino y su par mendocino, Alfredo Cornejo: el primero se queda con la presidencia del partido a la salida de Martín Lousteau y el segundo, con la conducción del bloque en la Cámara Baja. «Si Valdés mandaba a Diógenes al bloque de Provincias Unidas, se iba a diluir y lo iban a terminar conduciendo otros gobernadores», dijeron a LPO.

    En el Senado, en cambio, el gobernador litoraleño apuesta a que Vischi mantenga la conducción del bloque y, de esa manera, prevalezca sobre sus pares de Provincias Unidas. Para eso, habría pactado con Pullaro y Losada la postulación de Luis Naidenoff para la Auditoría General de la Nación, que todavía tiene vacantes sus cargos en representación de ambas cámaras.

    Para que Vischi mantenga la conducción, Valdés pactó con Pullaro y Losada la postulación de Luis Naidenoff para la Auditoría General de la Nación.

    Un senador radical le dijo a LPO que, en rigor, esa jugada no habría sido tanto de Valdés como de Maximiliano Abad, quien se habría animado a ordenar los tantos en una reunión de la UCR con Bullrich. «Teníamos a Naidenoff y (Víctor) Zimmermann peleando por la AGN y Abad planteó que había que contener a los dos delante de Bullrich, que fue a la Rosada y lo terminó resolviendo en un par de horas», aseguró.

    Según ese testimonio, el gobierno habría aceptado darle un cargo al chaqueño por su colaboración en recinto durante los primeros dos años de Javier Milei. Además, Leandro Zdero fue uno de los tres gobernadores que cerró alianza con el oficialismo en los comicios de octubre, otra razón para compensar la pleitesía provincial y resolver una disputa interna del bloque.

    En el diseño de los contrapesos, Valdés también negocia con Cornejo el lugar de Mariana Juri, senadora por Mendoza, en ese interbloque con PU o en el partido. Y además, un senador experimentado comentó a LPO que hasta Carlos «Camau» Espínola está esperando «una conversación» con el gobernador correntino para tomar definiciones, pese a que desde el entorno del exregatista se muestran prudentes y alegan que «hay tiempo hasta febrero o marzo».